Reflexiones de Adriana Vindas
Río Segundo, Alajuela Province, Costa Rica
Río Segundo, Alajuela Province, Costa Rica
Día Internacional del Terapeuta Floral
"Un día como hoy , 24 de Septiembre de 1886 nacía en Moseley, Inglaterra, el Dr. Edward Bach un médico inglés de descendencia galesa, que a pesar de poseer numerosos títulos académicos, como especialista en patología, bacteriología y homeopatía, dio la espalda a la investigación ortodoxa porque se sentía insatisfecho con la forma en que la medicina se concentraba sólo en las enfermedades haciendo caso omiso de la persona en su totalidad. Fue así que rompió los tubos de ensayo de su laboratorio , descartó los métodos científicos y su dependencia de los laboratorios y aspirando a un enfoque más holístico , al mismo tiempo que su sensibilidad con la naturaleza iba creciendo, empezó a recolectar plantas y en particular las flores , la parte más desarrollada de una planta, hasta encontrar en 38 de ellas un nuevo sistema de medicina, enfocado en los estados mentales o anímicos que permitieran tratar las personalidades y sentimientos de sus pacientes, y con ellos el alivio de sus desdichas y sufrimientos físicos, de manera natural, desbloqueando el potencial de curación de sus cuerpos,y permitiendo que volviese a funcionar nuevamente.
Fue así que en pocos años logró crear un acercamiento curativo completamente nuevo, que se centrara exclusivamente en la salud emocional y espiritual de la gente, en lugar de los síntomas físicos. De todos modos, Bach siempre habló de los remedios no como un logro personal, sino como un regalo recibido de la naturaleza y de Dios.
Y precisamente porque son un regalo y no una creación humana, el sistema de los 38 remedios es perfecto y completo en sí mismo. Y aún hoy, después de casi 100 años, sigue estando vigente, porque las emociones humanas no han cambiado desde los años 30, aunque las causas de nuestros miedos, preocupaciones, celos y entusiasmos sean diferentes.
El Dr. Bach gozaba del don de la curación a través de la imposición de sus manos, pero él entendía que este don no era compartido por todos, y que no podría ser aprendido o transmitido fácilmente, por ello a través de estos remedios y los sencillos métodos para su utilización, puso ese mismo poder al alcance de todos. Asi soñó con otra clase de hospital, un hospital donde la gente pudiera ir libremente en la búsqueda de si mismos y de aprender las lecciones que la vida les enseña. Soñó con médicos que comprendieran a la gente como individuos y que estudiaran la naturaleza humana, en lugar de tubos de ensayo y resultados clínicos de laboratorio; e imaginaba a los pacientes haciéndose cargo de su propia salud, entendiendo y aceptando las necesidades de sus almas, en lugar de atender únicamente las necesidades del cuerpo.
El hospital del futuro, ese santuario de paz, esperanza y alegría, se encuentra ahora en nosotros. Sólo tenemos que elegir descubrirlo.
El hospital, el médico y el paciente que describe el Dr. Bach son la misma cosa. Todos ellos se encuentran en cada uno de nosotros. El hospital no es un edificio en algún lugar, sino un estado mental en nuestro interior, un ángulo de nuestra alma. El médico del futuro y el paciente con sus facultades somos usted y yo, cada uno de nosotros ayudándonos a nosotros mismos y entre nosotros con estos remedios."
Centro Bach
"Un día como hoy , 24 de Septiembre de 1886 nacía en Moseley, Inglaterra, el Dr. Edward Bach un médico inglés de descendencia galesa, que a pesar de poseer numerosos títulos académicos, como especialista en patología, bacteriología y homeopatía, dio la espalda a la investigación ortodoxa porque se sentía insatisfecho con la forma en que la medicina se concentraba sólo en las enfermedades haciendo caso omiso de la persona en su totalidad. Fue así que rompió los tubos de ensayo de su laboratorio , descartó los métodos científicos y su dependencia de los laboratorios y aspirando a un enfoque más holístico , al mismo tiempo que su sensibilidad con la naturaleza iba creciendo, empezó a recolectar plantas y en particular las flores , la parte más desarrollada de una planta, hasta encontrar en 38 de ellas un nuevo sistema de medicina, enfocado en los estados mentales o anímicos que permitieran tratar las personalidades y sentimientos de sus pacientes, y con ellos el alivio de sus desdichas y sufrimientos físicos, de manera natural, desbloqueando el potencial de curación de sus cuerpos,y permitiendo que volviese a funcionar nuevamente.
Fue así que en pocos años logró crear un acercamiento curativo completamente nuevo, que se centrara exclusivamente en la salud emocional y espiritual de la gente, en lugar de los síntomas físicos. De todos modos, Bach siempre habló de los remedios no como un logro personal, sino como un regalo recibido de la naturaleza y de Dios.
Y precisamente porque son un regalo y no una creación humana, el sistema de los 38 remedios es perfecto y completo en sí mismo. Y aún hoy, después de casi 100 años, sigue estando vigente, porque las emociones humanas no han cambiado desde los años 30, aunque las causas de nuestros miedos, preocupaciones, celos y entusiasmos sean diferentes.
El Dr. Bach gozaba del don de la curación a través de la imposición de sus manos, pero él entendía que este don no era compartido por todos, y que no podría ser aprendido o transmitido fácilmente, por ello a través de estos remedios y los sencillos métodos para su utilización, puso ese mismo poder al alcance de todos. Asi soñó con otra clase de hospital, un hospital donde la gente pudiera ir libremente en la búsqueda de si mismos y de aprender las lecciones que la vida les enseña. Soñó con médicos que comprendieran a la gente como individuos y que estudiaran la naturaleza humana, en lugar de tubos de ensayo y resultados clínicos de laboratorio; e imaginaba a los pacientes haciéndose cargo de su propia salud, entendiendo y aceptando las necesidades de sus almas, en lugar de atender únicamente las necesidades del cuerpo.
El hospital del futuro, ese santuario de paz, esperanza y alegría, se encuentra ahora en nosotros. Sólo tenemos que elegir descubrirlo.
El hospital, el médico y el paciente que describe el Dr. Bach son la misma cosa. Todos ellos se encuentran en cada uno de nosotros. El hospital no es un edificio en algún lugar, sino un estado mental en nuestro interior, un ángulo de nuestra alma. El médico del futuro y el paciente con sus facultades somos usted y yo, cada uno de nosotros ayudándonos a nosotros mismos y entre nosotros con estos remedios."
Centro Bach